Especialistas en optometría y contactología en Monforte de Lemos

Protocolo de Gabinete Optométrico

Los optometristas de Optinova, hemos empezado a trabajar con un protocolo de gabinete para ofreceros un servicio de atención optométrica personalizada y la mejor solución visual.

Este protocolo no es un examen visual convencional en el que únicamente valoramos el sistema visual con el único fin de buscar una “mayor cantidad de visión”.

Hemos incluido una serie de pruebas que valoran la visión binocular, para poder conocer el sistema visual, motor y sensorial y ver cómo están integrados, ya que los problemas derivados de una disfunción binocular provocan importantes síntomas que suelen pasar desapercibidos en un examen visual convencional, pero afectan directamente a la calidad visual y a la capacidad de aprendizaje limitando el desarrollo potencial completo.

Nuestro protocolo en el gabinete

Las pruebas del protocolo de gabinete optométrico son:

• Acogida al cliente: se revisa la historia clínica de cada persona.
• Anamnesis: se recogen los datos de la historia clínica del paciente: su motivo de consulta, su queja principal, sus síntomas, historia ocular y médica, tratamientos oculares previos, historia familiar y los hábitos del usuario.
• Pruebas preliminares optométricas: son una serie de pruebas que nos van a indicar el estado motor de nuestra visión. Se realiza la toma de agudezas visuales, Cover Test para saber si existen desviaciones latentes o manifiestas, motilidad ocular y la respuesta pupilar a la luz y a la acomodación.
• Refracción objetiva: Realizamos una queratometría para conocer los datos biométricos de nuestros pacientes y una retinoscopía para tener un valor objetivo de su estado refractivo.
• Refracción subjetiva: conseguiremos la máxima cantidad de visión.
• Pruebas complementarias: realizaremos test de Worth, punto próximo de convergencia, amplitud de acomodación, ARN/ARP, forias, vergencias, estereopsis (visión en 3D), rejilla de Amsler (campo visual central), confrontación de campos (campo visual periférico), test de color y sensibilidad al contraste. Con todas estas pruebas conseguiremos conocer el estado sensorial de nuestra visión y ver cómo está integrado con el sistema motor.
• Biomicroscopia: observaremos que la superficie anterior del ojo (párpados, pestañas, conjuntiva, iris, cornea…) esté en perfectas condiciones y, además valoraremos la existencia o no de opacidad de medios (cristalino cámara anterior y posterior).

Protocolo detección ojo seco

• Cuestionario McMonnies
• Toma AV en monocular y binocular
• Biomicroscopia:

  Valoración estructuras oculares observables: párpados, pestañas, orificios gándulas de Meibomio, conjuntiva bulbar y palpebral, córnea, iris y pupila.

  Clasificación enrojecimiento

  BUT (tiempo rotura lagrimal), tinción con fluoresceína y Altura menisco lagrimal (AML)(Cualitativa)

• Test de Shirmer (Cuantitativa)
• Otras: valoración frecuencia del parpadeo
• Conclusión/Tratamiento
• ** Test de Shirmer resultados:

  Valora cantidad/volumen.Se cierran los ojos durante cinco minutos, suavemente. Pasado este tiempo, se retiran las tiras y se mide la humedad.

  Resultados:Si la medición es inferior a 10 mm de tira húmeda después de 5 min, se diagnostica deficiencia de lágrima acuosa. Un resultado normal suele dar más de 10 mm de tira húmeda.

• ** Altura menisco lagrimal: se valora la estabilidad lagrimal.

  Iluminación difusa

  Desde el centro del párpado inferior

  Resultados:

  Claramente visible, escaso o ausente

  Presencia de detritus, espumilla

  Regular o irregular

Protocolo presión intraocular

La presión intraocular o PIO hace referencia la presión que ejercen los fluidos dentro del ojo. Habitualmente se consideran valores normales de la tensión intraocular aquellos que se encuentren entre los 11 y los 21 milímetros de mercurio (mmHg).

La medición de la PIO es importante porque es uno de los factores de riesgo a tener en cuenta en el diagnóstico y seguimiento del glaucoma, la segunda causa de ceguera en el mundo.

Se realizarán 3 mediciones de cada ojo en 3 días diferentes, a horas diferentes para obtener un valor más fiable ya que la PIO sigue un ritmo circadiano que depende del ritmo sueño-vigilia. Su máximo se sitúa, aproximadamente, entre las 8 y las 11 de la mañana, y el mínimo se da por la tarde. La variación durante el día puede ser de hasta 3-5 mmHg.